Pablo Albo nació en Alicante hace algún tiempo. Es cuentista porque todo el rato lleva un cuento en la cabeza. O más. Piensa en ellos. Se le salen de la boca. Se le ponen en el papel mientras él trata de acercarse a sus secretos. Algunos cuentos suyos los pusieron en libros para que viajaran solos. Ha contado cuentos a personas de todos los tamaños en casi todos los rincones del país que habita. Desde 1994 entrega palabras a gentes de todas las edades mientras les mira a los ojos.